¿Se puede trabajar en farmacia sin título universitario?

Trabajar en farmacia tiene aspectos positivos que pueden resultar motivantes para muchas personas, incluso para aquellas que no son farmacéuticos. Por ejemplo, puede ser un trabajo muy gratificante para quienes les atrae el mundo de la salud y el bienestar. En una botica tienes la oportunidad de ser parte de la atención sanitaria a la ciudadanía, y ofrecer un servicio fundamental que ayuda a numerosas personas. También puede interesarte la estabilidad laboral que suele caracterizar al sector farmacéutico así como su oferta de empleo. 

Sea cuales sean tus motivaciones, si no eres farmacéutico pero te has planteado alguna vez trabajar en una farmacia, tenemos una buena noticia para ti. ¡Puedes hacerlo! 

Puestos en los que se puede trabajar sin título universitario

Dentro del trabajo en una farmacia, podemos encontrar distintos puestos, que tendrán requisitos distintos en cuanto al nivel de formación.

El primer puesto que se nos viene a la cabeza al pensar en una botica es, obviamente, el de farmacéutico. Sin embargo, tanto si eres titular como adjunto, en España necesitarás el título universitario para ejercer como tal. Según la legislación actual, el ejercicio de la profesión farmacéutica en una oficina de farmacia está reservado a los licenciados o graduados en Farmacia.

Pero entonces… ¿Cuáles son los puestos a los que sí se puede acceder sin pasar por la facultad? Además de los perfiles de personal de apoyo como administrativos, mozos de almacén o personal de limpieza, existen dos figuras en la farmacia que no tendrán ese requisito. Se trata del técnico de farmacia y el auxiliar de farmacia, que trabajarán siempre bajo la supervisión y responsabilidad de un farmacéutico titulado. A continuación, profundizaremos más en cada uno de estos puestos, cómo acceder a ellos y cuáles son sus principales funciones.

Técnico de farmacia

El puesto de técnico de farmacia, aunque no exige el título universitario, sí requiere una formación específica. En España, la titulación necesaria para desempeñar esta profesión es la de Técnico en Farmacia y Parafarmacia. Para ello, es necesario completar un ciclo formativo de grado medio, impartido en centros de educación y formación profesional. La duración de este ciclo formativo suele ser de dos años académicos.

Durante este ciclo formativo, los estudiantes adquieren conocimientos y habilidades relacionados con la dispensación de medicamentos, el manejo de productos farmacéuticos, la atención al cliente, la gestión de almacenes y otras tareas específicas del ámbito farmacéutico. Al finalizar y obtener el título de Técnico en Farmacia y Parafarmacia, los graduados pueden trabajar como técnicos en oficinas de farmacia, hospitales, laboratorios farmacéuticos y otros establecimientos relacionados con el sector de la salud.

Las funciones de los técnicos de farmacia pueden variar ligeramente dependiendo de la legislación específica de cada comunidad autónoma.Pero ¡OJO! Como hemos comentado, su trabajo estará supervisado por un farmacéutico. A continuación, se enumeran algunas de las principales:

  • Dispensar medicamentos. Los técnicos pueden preparar y dispensar medicamentos siguiendo las indicaciones y recetas proporcionadas por los farmacéuticos.
  • Atender al cliente. Además, pueden proporcionar información básica sobre medicamentos, posología y efectos secundarios, así como responder a algunas preguntas y consultas generales.
  • Realizar labores administrativas. Como por ejemplo, gestionar el inventario de medicamentos, llevar registros de ventas o elaborar informes.
  • Preparar fórmulas magistrales según las indicaciones de los farmacéuticos.
  • Mantener el área de trabajo limpia y ordenada, incluyendo el mostrador y las áreas de almacenamiento.

Auxiliar de farmacia

A diferencia de los puestos anteriores, para ser auxiliar de farmacia en España no se requiere una titulación específica ni una formación formal. Por lo tanto, no existe un título oficial o un ciclo formativo específico para desempeñar esta profesión. Sin embargo, aunque no hay una formación obligatoria, existen programas de capacitación y cursos de farmacia que pueden ser de gran utilidad para adquirir conocimientos sobre terminología farmacéutica, funciones básicas en una farmacia, atención al cliente, dispensación de medicamentos, manejo de productos farmacéuticos y otras tareas relacionadas. Además, este tipo de formación puede ayudarte a potenciar tu Currículum Vitae y estar más preparado para encontrar trabajo como auxiliar.

Por lo tanto, el puesto de auxiliar de farmacia es ocupado, en general, por personas que adquieren conocimientos y habilidades en el campo de la farmacia a través de la experiencia laboral o de cursos y programas de formación complementaria. Entre las principales funciones de los auxiliares encontramos:

  • Atender al cliente. Los auxiliares pueden atender a los clientes en la farmacia, ofreciendo asesoramiento básico sobre productos de venta libre y proporcionando información general.
  • Realizar labores de apoyo. También pueden ayudar en la gestión del inventario, recepción y colocación de medicamentos y productos de parafarmacia.
  • Etiquetar y empaquetar. Entre sus tareas también se incluye la de etiquetar los productos correctamente, incluyendo los medicamentos y productos de parafarmacia.
  • Mantener el área de trabajo en buen estado.

Realizar tareas administrativas básicas. Como por ejemplo, asistir en la gestión de recetas, documentación relacionada, o en la preparación de pedidos.